RADIOLOGIA GENERAL
De manera general, la radiología es una rama de la medicina que utiliza imágenes para el diagnóstico y tratamiento de lesiones y enfermedades. Tiene su origen a finales del siglo XIX, cuando Wilhelm Roentgen descubrió los rayos X en 1895; hallazgo que le haría acreedor del Premio Nobel de Física en 1901.
No obstante la inicial discusión sobre las aplicaciones en medicina del descubrimiento de Roentgen, ya en 1903 fueron publicadas las primeras imágenes de la neumonía usando rayos X y se reconoció el potencial de esta técnica para el combate de la tuberculosis, una de las principales enfermedades de aquella época. Durante la Primera Guerra Mundial los rayos X se utilizaron de manera rutinaria entre las tropas norteamericanas, con el fin de reducir las pérdidas humanas.
La radiología tiene un papel de suma importancia en la salud. Algunos ejemplos de la aplicación de esta rama de la medicina son el hallazgo de lesiones o fracturas a causa de traumatismos (con rayos X); la detección temprana del cáncer de mama (a través de la mastografía), el seguimiento del adecuado desarrollo y la detección de posibles anormalidades en el feto (con el ultrasonido); o el uso conjunto de radiofármacos y PET para diagnóstico oportuno de tumores de origen endócrino.
En la actualidad la radiología incluye diversas técnicas además de los rayos X, como tomografías computarizadas, resonancias magnéticas nucleares, medicina nuclear, ultrasonidos y PET.
La radiología puede dividirse en “diagnóstica” e “intervencionista”. La primera permite diagnosticar el origen de síntomas y detectar enfermedades, así como conocer el progreso de un tratamiento determinado. Por otro lado, la radiología intervencionista utiliza las imágenes como guía para los procedimientos, ya que ayudan a los médicos al introducir catéteres, alambres y otros instrumentos y herramientas pequeñas en el cuerpo de los pacientes.
Cada año, el Día Mundial de la Radiografía se celebra el 8 de noviembre para conmemorar el aniversario del descubrimiento de los rayos X por Wilhelm Roentgen.
Debido a la gran variedad de estudios radiológicos convencionales en el sistema osteoarticular del cuerpo humano, es importante que exista una obra donde se encuentren plasmados los procedimientos y la forma como se debe desarrollar el procedimiento para la toma de cada proyección radiológica; éstos motivos condujeron a unificar criterios en lo relacionado con posicionamiento del paciente, posicionamiento de la estructura anatómica a radiografiar y criterios de evaluación; también se documenta gráficamente el posicionamiento del paciente y cómo debe quedar el estudio radiológico con los respectivos criterios de evaluación; aspectos fundamentales que contribuyen a la calidad en la toma de los estudios radiológicos.
La primera radiografía de la historia: la mano de Anna Bertha Ludwig. Se observa la presencia de un anillo en el dedo anular; dicho anillo aparece como una masa ovoidea de densidad metálica.
CLASIFICACION
Podemos clasificar a la radiologia segun:
El órgano, el sistema o la parte del cuerpo que se estudia
– Radiología neurológica o neurorradiología
– Radiología de cabeza y cuello
– Radiología odontológica
– Radiología torácica
– Radiología cardíaca
– Radiología abdominal
– Radiología gastrointestinal
– Radiología genitourinaria
– Radiología de la mama
– Radiología ginecológica
– Radiología vascular
– Radiología musculoesquelética
– Radiología pediátrica
– Radiología podológica
– Radiología geriátrica
Según su actividad principal:
– Medicina nuclear: Genera imágenes mediante el uso de trazadores radiactivos que se fijan con diferente afinidad a los distintos tipos de tejidos. Es una rama exclusivamente diagnóstica y en algunos países se constituye en especialidad médica aparte.
– Radiología diagnóstica o radiodiagnóstico: Se centra principalmente en diagnosticar las enfermedades mediante la imagen.
– Radiología intervencionista: Se centra principalmente en el tratamiento de las enfermedades, mediante el empleo de procedimientos quirúrgicos mínimamente invasivos guiados mediante técnicas de imagen.
La frontera entre radiología diagnóstica e intervencionista no está perfectamente definida: Los especialistas en diagnóstico también suelen realizar procedimientos intervencionistas en su área respectiva y los especialistas en tratamiento (los radiólogos intervencionistas) suelen encargarse del diagnóstico de las enfermedades del sistema circulatorio periférico. En la actualidad, en muchos países, la subespecialidad de radiología vascular e intervencionista está integrada con el resto de la radiología en una única especialidad, aunque hay controversia sobre si deberían separarse como especialidades oficiales.
MODALIDADES
– Radiología convencional: Se emplea radiación ionizante para la captura de imágenes de cualquier parte del cuerpo con un mayor énfasis en huesos y articulaciones.
– Sonografía, ecografía o ultrasonografía: Mediante el uso de los ultrasonidos se obtienen imágenes del interior del cuerpo específicamente órganos blandos que no son visibles mediante la radiología convencional. Los huesos y el gas son barreras que impiden el paso eficaz de los ultrasonidos y limitan su empleo. Es el método idóneo para evaluar pacientes embarazadas ya que las ondas de ultrasonido no afectan el feto.
– Tomografía computarizada: Tomografía computarizada (TAC), permite realizar exploraciones tridimensionales de todos los órganos del cuerpo incorporando a un tubo de rayos X giratorio un potente ordenador que es capaz de reconstruir las imágenes. Recientemente se está incorporando a las técnicas de la radiología la tomografía por emisión de positrones (PET o TEP). Se trata de una tecnología que utiliza isótopos radiactivos que se introducen en moléculas orgánicas o radiofármacos que son inyectados al paciente y posteriormente se analiza la emisión radiactiva de los diferentes tejidos según la captación del radiofármaco que presenten. Generalmente se utiliza glucosa marcada con flúor-18, por lo que existe mayor afinidad por parte de las lesiones tumorales o inflamatorias. Se pueden realizar estudios combinando TAC y PET, lo que permite mayor resolución espacial junto con imágenes funcionales.
– Resonancia magnética: Los equipos contienen potentes dispositivos capaces de generar campos magnéticos de hasta más de 3 teslas. Los campos así generados son capaces de alinear ordenadamente el momento magnético nuclear de los átomos con un número impar de nucleones del organismo que se estudia. Mediante antenas de radiofrecuencia, los momentos de ciertos átomos del organismo se desalinean, orientándose cada uno en una dirección distinta, al azar; cuando de dejan de emitir estas radiaciones electromagnéticas, los momentos se vuelven a alinear y emiten esa energía de radiofrecuencia antes recibida. Estas radiaciones, recogidas y procesadas por ordenador, se emplean para reconstruir imágenes del interior del cuerpo en cualquier dirección del espacio. La intensidad mayor o menor de la imagen resultante corresponde a la facilidad para liberar esa energía de cada tejido. Así pues, cada tejido se verá de distinta y particular forma.
– Mamografía: Utiliza una dosis baja de radiación y a su vez se comprime el seno, en la obtención de imágenes diagnósticas de las mamas o glándulas mamarias y tejido de las axilas. Esencial en el diagnóstico de cáncer de seno.
– Angiografía: Se estudian los vasos sanguíneos del cuerpo a través de imágenes obtenidas empleando el uso de radiación y un catéter por el cual se introduce un contraste radiopaco que permite la visualización de los vasos sanguíneos para su estudio y diagnóstico de una condición.
El profesional médico encargado de supervisar el examen radiológico e interpretar la imagen médica es el médico radiólogo o el médico nucleísta, en el caso de la medicina nuclear. El profesional encargado de la obtención de imágenes médicas es el técnico en radiología.
Fuentes:
«Radiologia: Disciplina esencial para la salud» https://www.gob.mx/salud/articulos/la-radiologia-y-su-importancia-para-la-salud#:~:text=De%20manera%20general%2C%20la%20radiolog%C3%ADa,Nobel%20de%20F%C3%ADsica%20en%201901.
«Radiología convencional Proyecciones básicas y adicionales para el cuerpo humano – Tomo 1» – Repositorio de la Fundación Universitaria del Área Andina.
«Radiologia» https://es.wikipedia.org/wiki/Radiolog%C3%ADa
«Historia de la primera radiografia» https://www.foronuclear.org/actualidad/a-fondo/historia-de-la-primera-radiografia/
RESONANCIA MAGNETICA NUCLEAR
La resonancia magnética es una prueba de diagnóstico. Se trata de un examen imagenológico que utiliza imanes y ondas de radio potentes para crear imágenes del cuerpo de la persona. No se utiliza radiación, es decir, rayos X.
La resonancia permite obtener imágenes médicas que usan un campo magnético y ondas de radio generadas por computadora para crear imágenes detalladas tanto de los órganos como de lo tejidos del cuerpo.
Normalmente, las máquinas de resonancia magnética son grandes imanes y tienen forma de tubo. Cuando el paciente se recuesta dentro del aparato de resonancia magnética, el campo magnético provoca una realineación temporal de las moléculas de agua del cuerpo. De esta manera, las ondas hacen que los átomos alineados generen unas señales débiles que se utilizan para crear imágenes transversales de resonancia magnética.
En los últimos años, el aparato de resonancia magnética también ha permitido producir imágenes 3D para que se puedan visualizar desde diferentes ángulos.
¿En qué consiste?
Las señales que emiten las ondas electromagnéticas se recogen y se traducen en imágenes que pueden observarse en un monitor, permitiendo al profesional estudiarlas.
El aparato de resonancia magnética tiene forma tubular y está abierto a ambos extremos. Para realizar la prueba, el paciente deberá recostarse sobre una mesa móvil que se va a deslizar hacia el interior del tubo. El aparato crea un fuerte campo magnético alrededor del paciente, emitiendo ondas de radio hacia el cuerpo. Sin embargo, el paciente no sentirá dolor en ningún momento de la prueba.
En cualquier caso, la resonancia magnética puede tener una duración de entre 15 y 60 minutos, y el paciente debe permanecer completamente inmóvil, porque en caso contrario las imágenes pueden quedar borrosas.
¿Por qué se realiza?
La resonancia magnética permite a los expertos diferenciar perfectamente las distintas estructuras anatómicas para realizar un diagnóstico más claro y completo. Gracias a esta capacidad de observar de forma detallada los tejidos y los órganos, el especialista puede diagnosticar la presencia de lesiones o enfermedades en el área estudiada.
Existen varios motivos por los que una persona puede ser sometida a una resonancia magnética:
– Resonancia magnética de la cabeza y la médula espinal: esclerosis múltiple, aneurismas, trastornos del ojo, trastornos del oído, ictus, tumores, traumatismos craneoencefálicos…
– Resonancia magnética del pecho: mamas y cáncer de mama, funcionamiento del corazón, bloqueos sanguíneos…
– Resonancia magnética de órganos internos: bazo, riñones, hígado, próstata, ovarios, bazo…
– Resonancia magnética de huesos y articulaciones: infecciones óseas, tumores en tejidos blandos, lesiones ligamentosas, anomalías en la columna vertebral, traumatismos.
Generalmente, el paciente debe ponerse una bata hospitalaria y debe quitarse todos aquellos objetos que puedan afectar a las imágenes por resonancia magnética, como pueden ser los siguientes:
– Objetos de metal.
– Relojes.
– Horquillas del pelo.
– Audífonos.
– Dentadura postiza.
– Sostén con aros.
– Cosméticos que tengan partículas de metal en su composición.
¿Qué se siente durante el examen?
Esta prueba suele durar entre unos 30 y 60 minutos. No causa dolor pero si la persona tiene miedo a los espacios cerrados puede generar claustrofobia. En ese caso, pueden dar un medicamento al paciente para adormecerlo y que sienta menos ansiedad.
En cualquier caso, es importante que el paciente permanezca quieto durante el examen.
Riesgos de la resonancia magnética
La resonancia magnética no usa ninguna radiación. El tipo de contraste que suele utilizarse es el gadolinio, que es muy seguro y rara vez provoca algún tipo de reacción alérgica.
Sin embargo, los fuertes campos magnéticos que se crean durante la prueba, pueden provocar que algunos implantes como los marcapasos no funcionen igual de bien. Los imanes también pueden provocar que una pieza de metal dentro del cuerpo se desplace o cambie de posición.
¿COMO FUNCIONA?
Los equipos de IRM son máquinas con muchos componentes que se integran con gran precisión para obtener información sobre la distribución de los átomos en el cuerpo humano utilizando el fenómeno de RM. El elemento principal del equipo es un imán capaz de generar un campo magnético constante de gran intensidad. Actualmente, mientras que la mayoría de los sistemas opera a 0,5 a 1,5 teslas, los sistemas comerciales disponibles están entre 0,2 T – 7 T. La mayoría de los imanes clínicos son superconductores que requieren helio líquido. Intensidades de campo más bajas se pueden lograr con imanes permanentes, utilizados a menudo en escáneres «abiertos» de resonancia magnética para pacientes claustrofóbicos.
El campo magnético constante se encarga de alinear los momentos magnéticos de los núcleos atómicos básicamente en dos direcciones, paralela (los vectores apuntan en el mismo sentido) y anti-paralela (apuntan en sentidos opuestos).11 La intensidad del campo y el momento magnético del núcleo determinan la frecuencia de resonancia de los núcleos, así como la proporción de núcleos que se encuentran en cada uno de los dos estados.
Esta proporción está gobernada por las leyes de la estadística de Maxwell-Boltzmann que, para un átomo de hidrógeno y un campo magnético de 1,5 teslas a temperatura ambiente, dicen que apenas un núcleo por cada millón se orientará paralelamente, mientras que el resto se repartirán equitativamente entre ambos estados, ya que la energía térmica de cada núcleo es mucho mayor que la diferencia de energía entre ambos estados. La enorme cantidad de núcleos presente en un pequeño volumen hace que esta pequeña diferencia estadística sea suficiente como para ser detectada.
El siguiente paso consiste en emitir la radiación electromagnética a una determinada frecuencia de resonancia (Pulso de radiofrecuencia o pulso RF). Debido al estado de los núcleos, algunos de los que se encuentran en el estado paralelo o de baja energía cambiarán al estado antiparalelo o de alta energía y, al cabo de un corto periodo, retornarán a su estado paralelo de baja energía previo, perdiendo (en forma de fotones) la energía que habían ganado. Estos fotones podrán ser detectados usando el instrumental adecuado. Como el rango de frecuencias es el de las radiofrecuencias para los imanes citados, el instrumental suele consistir en una bobina que hace de antena, receptora y transmisora, un amplificador y un sintetizador de RF.
Debido a que el imán principal genera un campo constante, todos los núcleos que posean el mismo momento magnético (por ejemplo, todos los núcleos de hidrógeno) tendrán la misma frecuencia de resonancia. Esto significa que una señal que ocasione una RM en estas condiciones podrá ser detectada, pero con el mismo valor desde todas las partes del cuerpo, de manera que no existe información espacial o información de dónde se produce la resonancia. Para resolver este problema se añaden las llamadas bobinas de gradiente. Cada una de las bobinas genera un campo magnético de una cierta intensidad con una frecuencia controlada (por ejemplo en una parte del cuerpo se genera un campo magnético de 0,5 T, en otra parte 1 T, en otra parte 1,5 T, etc.). Estos campos magnéticos alteran el campo magnético ya presente y, por tanto, la frecuencia de resonancia de los núcleos. Utilizando tres bobinas ortogonales es posible asignarle a cada región del espacio (en este caso región del cuerpo humano) una frecuencia de resonancia diferente, de manera que cuando se produzca una resonancia a una frecuencia determinada será posible determinar la región del espacio de la que proviene.
En vez de aplicar tres gradientes diferentes que establezcan una relación única entre frecuencia de resonancia y punto del espacio, es posible utilizar diferentes frecuencias para las bobinas de gradiente, de manera que la información queda codificada en espacio de fases (se pueden ver imágenes en cortes sagitales, coronales y axiales). Esta información puede ser transformada en posiciones espaciales utilizando la transformada de Fourier discreta.
Una IRM produce una imagen detallada de la columna vertebral.
Fuentes:
«Resonancia magnetica» https://www.mayoclinic.org/es/tests-procedures/mri/about/pac-20384768
«Imagen por resonancia magnetica» https://es.wikipedia.org/wiki/Imagen_por_resonancia_magn%C3%A9tica
«¿Que es la resonancia magnetica» https://www.topdoctors.es/diccionario-medico/resonancia-magnetica#
«Resonancia magnetica de columna» https://www.topdoctors.es/diccionario-medico/resonancia-magnetica-de-columna
TOMOGRAFIA COMPUTADA
Una tomografía computarizada combina una serie de radiografías que se toman desde diferentes ángulos alrededor del cuerpo y utiliza el procesamiento informático para crear imágenes (o cortes) transversales de los huesos, vasos sanguíneos y tejidos blandos que hay en el cuerpo. Las imágenes de la tomografía computarizada proporcionan información más detallada que las de las radiografías convencionales.
Una tomografía computarizada (TC) tiene varios usos, pero sirve especialmente para examinar de manera rápida a las personas que puedan tener lesiones internas como consecuencia de accidentes automovilísticos u otros tipos de traumatismos. Una tomografía computarizada se puede utilizar para visualizar casi todas las partes del cuerpo y diagnosticar enfermedades o lesiones, así como para planificar tratamientos médicos, quirúrgicos o de radiación.
¿Por qué se realiza?
El médico puede recomendarte una tomografía computarizada con los siguientes fines:
– Diagnosticar trastornos musculares y óseos, como tumores óseos y fracturas.
– Precisar la ubicación de un tumor, una infección o un coágulo sanguíneo.
– Guiar procedimientos, como cirugías, biopsias y radioterapia.
– Detectar y controlar enfermedades y afecciones, como cáncer, enfermedades cardíacas, nódulos pulmonares y tumores de hígado
Controlar la efectividad de determinados tratamientos, como el tratamiento para el cáncer.
– Detectar lesiones internas y sangrado interno.
Riesgos
Exposición a la radiación
Durante una tomografía computarizada, te expones brevemente a radiación ionizante. La cantidad de radiación es mayor que la que recibes durante una radiografía simple porque la tomografía computarizada reúne información más detallada. No se ha demostrado que las bajas dosis de radiación que se usan en las tomografías computarizadas causen daño a largo plazo. Sin embargo, en dosis mucho más altas, el riesgo potencial de cáncer puede aumentar ligeramente.
Las tomografías computarizadas presentan muchos beneficios que superan cualquier riesgo potencial pequeño. Los médicos usan la dosis mínima posible de radiación para obtener la información médica necesaria. Además, las máquinas y técnicas más nuevas y más rápidas requieren menos radiación que la empleada anteriormente.
MATERIAL DE CONTRASTE
En algunas tomografías computarizadas (TC) es necesario utilizar un tinte especial denominado “material de contraste” para resaltar las áreas del cuerpo que se examinarán. El material de contraste bloquea los rayos X y se observa de color blanco en las imágenes, lo que puede ayudar a destacar los vasos sanguíneos, los intestinos y otras estructuras.
El material de contraste se puede administrar:
Por vía oral. Para la exploración del esófago o estómago, es posible que debas ingerir un líquido que contenga material de contraste. Esta bebida puede tener un sabor desagradable.
Mediante una inyección. Los agentes de contraste pueden inyectarse a través de una vena en el brazo para que la vesícula biliar, las vías urinarias, el hígado o los vasos sanguíneos se resalten en las imágenes. Puedes experimentar una sensación de calor durante la inyección o un sabor metálico en la boca.
Mediante un enema. Se puede introducir un material de contraste en el recto para visualizar los intestinos. Este procedimiento puede hacer que te sientas hinchado e incómodo.
Durante el procedimiento
Los escáneres de tomografía computarizada tienen la forma de una dona grande apoyada sobre un lado. Te recostarás sobre una mesa motorizada estrecha que se desliza a través de la apertura hacia un túnel. Se podrían usar correas y almohadas para ayudarte a mantener la posición. Durante una tomografía computarizada de la cabeza, es posible que se coloque un soporte especial sobre la mesa para mantener la cabeza quieta.
A medida que la mesa se desliza hacia el interior del escáner, los detectores y el tubo de rayos X rotarán a tu alrededor. Con cada rotación se obtienen varias imágenes de finos cortes de tu cuerpo. Puedes escuchar sonidos como zumbidos y chasquidos.
Un técnico que se encuentra en otra habitación puede verte y escucharte. Podrás comunicarte con él a través de un intercomunicador. Es posible que el técnico te pida que contengas la respiración en algunos momentos para evitar imágenes borrosas.
Principio de funcionamiento
El aparato de TC emite un haz colimado de rayos X que incide sobre el objeto que se estudia. La radiación que no ha sido absorbida por el objeto es recogida por los detectores. Luego el emisor del haz, que tenía una orientación determinada (por ejemplo, estrictamente vertical a 90º) cambia su orientación (por ejemplo, haz oblicuo a 95º). Este espectro también es recogido por los detectores. El ordenador ‘suma’ las imágenes, promediándolas. Nuevamente, el emisor cambia su orientación (según el ejemplo, unos 100º de inclinación). Los detectores recogen este nuevo espectro, lo ‘suman’ a los anteriores y ‘promedian’ los datos. Esto se repite hasta que el tubo de rayos y los detectores han dado una vuelta completa, momento en el que se dispone de una imagen tomográfica definitiva y fiable.
Una vez que ha sido reconstruido el primer corte, la mesa donde el objeto reposa avanza (o retrocede) una unidad de medida (hasta menos de un milímetro) y el ciclo vuelve a empezar. Así se obtiene un segundo corte (es decir, una segunda imagen tomográfica) que corresponde a un plano situado a una unidad de medida del corte anterior.
A partir de todas esas imágenes transversales (axiales), un computador reconstruye una imagen bidimensional que permite ver secciones de la pierna (o el objeto de estudio) desde cualquier ángulo. Los equipos modernos permiten incluso hacer reconstrucciones tridimensionales. Estas reconstrucciones son muy útiles en determinadas circunstancias, pero no se emplean en todos los estudios, como podría parecer. Esto es así debido a que el manejo de imágenes tridimensionales no deja de tener sus inconvenientes.
Un ejemplo de imagen tridimensional es la imagen ‘real’. Como casi todos los cuerpos son opacos, la interposición de casi cualquier cuerpo entre el observador y el objeto que se desea examinar hace que la visión de este se vea obstaculizada. La representación de las imágenes tridimensionales sería inútil si no fuera posible lograr que cualquier tipo de densidad que se elija no se vea representada, con lo que determinados tejidos se comportan como transparentes. Aun así, para ver completamente un órgano determinado es necesario mirarlo desde diversos ángulos o hacer girar la imagen. Pero incluso entonces veríamos su superficie, no su interior. Para ver su interior debemos hacerlo a través de una imagen de corte asociada al volumen y aun así parte del interior no siempre sería visible. Por esa razón, en general, es más útil estudiar una a una todas las imágenes consecutivas de una secuencia de cortes que recurrir a reconstrucciones en bloque de volúmenes, aunque a primera vista sean más espectaculares.
USOS DE LA TOMOGRAFIA COMPUTADA
La TC permite estudiar casi todos los órganos internos del cuerpo, desde la cabeza hasta las extremidades, incluyendo los huesos, tejidos blandos, corazón y vasos sanguíneos. La TC es una exploración o prueba radiológica muy útil para el estadiaje o estudio de extensión de los cánceres en especial en la zona craneana, como el cáncer de mama, cáncer de pulmón y cáncer de próstata. Asimismo, la TC es de gran utilidad en los servicios de emergencia, por su gran velocidad de barrido de cuerpo entero, que permite detectar eficazmente fracturas, hemorragias y lesiones de órganos en pocos segundos o minutos. En los últimos años, se ha mejorado su capacidad diagnóstica para el sistema cardiocirculatorio, pudiendo evaluar eficazmente enfermedades agudas y crónicas del corazón y de los vasos sanguíneos.
Otro uso es la simulación virtual y planificación de un tratamiento del cáncer con radioterapia, para lo cual es imprescindible el uso de imágenes en tres dimensiones que se obtienen de la TC.
Las primeras TC se instalaron en España a finales de los años 1970. Los primeros TC servían solamente para estudiar el cráneo, y fue con posteriores generaciones de equipos cuando pudo estudiarse el cuerpo completo. Al principio era una exploración cara y con pocas indicaciones de uso. Actualmente es una exploración de rutina de cualquier hospital, habiéndose abaratado mucho los costos. Con el desarrollo de la TC helicoidal, los cortes son más finos, incluso submilimétricos y la velocidad de barrido mayor. La nuevas TC multicorte incorporan varios anillos de detectores (típicamente entre 16 y 320), lo que permite la adquisición de múltiples cortes simultáneos en cada rotación del tubo de rayos X, lo aumenta aún más la rapidez, logrando imágenes volumétricas en tiempo real.
Pantalla típica del software de diagnóstico, que muestra una vista 3D y tres vistas MPR.
Fuentes:
«Exploracion por tomografia computarizada» https://www.mayoclinic.org/es/tests-procedures/ct-scan/about/pac-20393675
«Tomografia axial computada» https://es.wikipedia.org/wiki/Tomograf%C3%ADa_axial_computarizada